LA MELODIA DEL AMOR - CAPITULO 2




Él estaba en el local. Ella no podía verlo. No sabía dónde estaba. Lo único que sabía era que podía sentir su presencia. En alguna parte.
Había sentido que estaba allí casi desde el momento en que había salido al escenario. Al principio, reprochándose ser tan fantasiosa; era ridículo, después de todo el tiempo que había pasado, sentir aquello. No había ninguna razón lógica para creerlo. Pero la sensación persistió, hasta tal punto que acabó convencida de que estaba allí. Escuchándola.
Aquello era increíble. Era la primera vez que cantaba en público en tres años. ¿Por qué iba a estar él allí?
Pero estaba. Lo había buscado entre el público con la mirada, pero era difícil discernir algo en la penumbra que había detrás del foco que la alumbraba. Sólo se veían siluetas, ningún rasgo distinguible entre ellas.
De todos modos, tampoco quería verlo. ¿Para qué? Había pasado tanto tiempo. Ella era diferente y él también. Sus vidas eran diferentes.
¡Pero estaba allí…!
El corazón le latió con fuerza en el pecho cuando se dispuso a cantar la última canción de la velada, rasgueando la melodía en la guitarra antes de entonar el estribillo, más reconocible.
En aquel momento, deseó que aquella canción no estuviese en el programa, que hubiese elegido otra como final. Pero era la canción que la había hecho famosa, por la que era recordada. Y no la había cantado en público durante mucho, mucho tiempo.

Era su canción, la canción de los dos…

No hay comentarios:

Publicar un comentario